Cada día son peores las noticias, al menos vistas por los periodistas. Por eso viene bien relativizar un poco las cosas sin que ya se pueda decir que uno trabaja a favor de ese o aquel partido.
Mi amigo Javier Díaz Giménez me envía los sigientes gráficos que le agradezco:
Pinchad sobre las imágenes para ampliar
No constituten un argumento formal para demostrar que no hay crisis; pero sí sirven para esa relativización que nos vendría bien.
En el último gráfico se puede ver cómo las primeras diferencias de las tasas de crecimiento han ido descendiendo. Esto quiere decir que el crecimiento ya es en España no una aventura rara e imprevisible, sino parte integrante de la forma de caminar de nuestra economía.
La moraleja deseada es que habrá problemas como siempre los ha habido; pero que, aunque cada vez sean de naturaleza distinta, deberíamos tener un poco de confianza en nosotros mismos como aparato de crear riqueza.