Ni el detective de Raymond Chandler, ni el narrador de Joseph Conrad. Mi Marlowe de hoy es Shakespeare o eso piensa Isabel Gortazar, una irreductible vasca que hereda la terquedad de los viejos pescadores de bacalao.
Desde este topos privilegiado, y como miembro de la Marlowe Society, ha escrito generosamente sobre la figura real de Marlowe, sobre la fierecilla domada en The Clue is in the Shrew , en donde apaecerían las claves de su reconstrucción shakesperiana,y también sobre La Tempestad.
Sostiene Isabel haber probado, frente a otras posibles hipótesis, que Shakespeare no es el autor de Shakespeare; sino que Marlowe escribió las 36 tragedias y toda la poesía. Escucharle es toda una experiencia que mezcla la aventura, la scholarship y el ocultismo.
Su trabajo merece un Workshop. No perdamos tiempo y he aquí mi propuesta.
Marlowe and the authorship problem: A proposal of workshop.
1.La función autor.
El conocido ensayista magiar Theodor A. von Karman expondrá su no tan conocida conjetura de que el origen de esa función autor que se asocia al nombre de Foucault, proviene del Adorno de la escuela de Francoforte.
2.El problema de la autoría:
2.1 Las hipótesis de las que Harold Bloom se hace eco en su insuperable (?) taratado sobre el Bardo por excelencia.
2.2 La hipótesis Marlowe a cargo de la Marlowe Society coordinada por la erudita Gortazar que expondrá por primera vez ante un público general las claves de su interpretación y presentará su tabajo sobre Othello, un underground classic que merece ya la salida del armario de la mera erudición.
3.La vida de Marlowe: master, aventurero, autor y espía, a cargo de Johannes Ur von Thia. Esta última parte del workshop puede parecer extraña e intempestiva, pero no se puede desperdiciar la ocasión de discutir la famosa tesis de ese viejo, olvidado y cascarrabias salzburgués:todo intelectual es un traidor. Los espías se reclutan entre los traidores y todo espía es un proscrito porque todo espía es un doble espía o podría muy bien serlo. Luego un espía está en una inmejorable posición para ser un intelectual.
Será un éxito entre literatos, críticos, filósofos y agentes de la propiedad intelectual.