La fecha es el 8 de Octubre. El lugar, Ifema. La maestra de ceremonias, a Presidenta de la Comunidad de Madrid, «chulapona» y liberal de las buenas, es decir de las austriacas y no de las escocesas. Entidad organizadora, la Cámara de Comercio de Madrid.
La ocasión se presenta como memorable, no tanto por la incertidumbre sobre la reincorporación de RR a la política activa, posibilidad ésta ya descartada, sino porque RR reaparece teatralmente como el padre del despegue económico de España aunque lo haga con un discurso sobre la economía latino americana al que nadie prestará ninguna atención, pero que, sin embargo, podrá dar pistas sobre las futuras actividades privadas del que fue vicepresidente económico con Aznar.
El morbo está , por lo tanto, en lo que quizá vaya a colar de rondón sobre la economía española y sus perspectivas de evitar el contagio de la crisis agosteña; en si apoyará el catastrofismo del PP o la confianza que tanto Botín como el Presidente del Gobierno parecen tener sobre la buena situación económica de España.
Difícil situación para RR pues debería quizá haber dicho algo de esto mientras todavía era el dieector gerente del FMI y no guardarse sus opiniones para una campaña electoral lanzada prematuramente por el PP.
Difícil situación también también porque el Fondo que todavía dirige no debería haber sido un simple testigo mudo durante todos estos últimos meses. Aunque en Bretton Woods nace para preocuparse más bien de problemas asociados a dificultades internacionales de pagos asociados a inestabilidades cambiarias, hace años que esperamos que se involucre en situaciones difíciles como los atuales que amenazan con dificultades sistémicas relacionadas con la liquidez o la solvencia dudosa de algunas instituciones, aunque sean privadas.
Y, para terminar con la dificultad de la situación en la que se encontrará RR dentro de un mes, habría que recordar que el decoro exigiría una cierta cuarentena ya que ha sido lo que ha sido con el apoyo de todos.
De todas formas, y para echar un poco de pimenta al asunto, me atrevo a decir que los periodistas de investigación no deberrían dejar pasar la ocasión de revisar las ideas de RR plasmadas en su tesis doctoral que, incomprensiblemente, no ha recibido atención suficiente ni siquiera por parte de aquellos, periodistas incluídos, que creen ver en él el salvador de una situación catástrófica que, malévolamente, parecen desear precisamnete para que la vuelta del maestro sea tan sonada como la de José Tomás.
Aunque ya está claro que no vuelve a la política, déjenme decirles que yo nunca creí en esa vuelta prque no me parecía que RR estuviera ya para arriesgarse frente las cornadas de la política y la malevolencia de aquellos indiscretos que puedieran indagar en sus ideas desgraciadamente plasmadas en un texto que puede consultarse en la Complutense y que poseen al menos los cinco miembros de su tribunal de tesis.